Inversión en eficiencia.
El Almond Board of California comenzó a invertir en investigaciones en 1982 para determinar si un nuevo método de irrigación —microirrigación—podría funcionar en las plantaciones de almendros. Anteriormente, los agricultores habían inundado sus campos o usado grandes aspersores. Los resultados fueron positivos y, al aplicar agua directamente en las raíces de los árboles en vez de en todo el campo, los agricultores ahorraron agua e incrementaron su producción. De hecho, desde la década de 1990 hasta la de 2010, los agricultores han reducido la cantidad de agua necesaria para cultivar almendras en un 33 por ciento.3 Actualmente, el 85% de las granjas de almendras de California usan sistemas de microirrigación4, casi dos veces la tasa de granjas californianas en general.5
Sabemos que todavía hay mucho por hacer, y es por eso que lo estamos haciendo. Para el 2025, nos comprometidos a reducir la cantidad de agua para cosechar una libra de almendras en un 20 por ciento adicional.
Para lograrlo, se están realizando nuevas mejoras. Apoyando dichos esfuerzos se encuentra el equipo de Alcance y Capacitación de Campo del Almond Board que brinda soporte práctico, se reúne uno a uno con los agricultores para capacitarlos o brindarles información técnica, y compartir mejores prácticas. Uno de dichos recursos, el Almond Irrigation Improvement Continuum, está ayudando a los agricultores a acelerar la adopción de tecnologías para la conservación del agua.